"Whatever became of the seed
That once grew in your hand
And the darts where your fingers did bleed
And the rush to your head?"
-- FLOGGING MOLLY, "You won't make a fool out of me" (Float)
No sé si es que en aquellos tiempos Santander estaba más viva o era yo el que lo estaba. La cosa es que siempre le echamos huevos, siempre nos lo pasamos bien, y éramos una pequeña familia. Ahora cada uno está por su lado, Némesis ha bajado muchísimo y a mí me toca echarle huevos otra vez y labrarme un porvenir. Pase lo que pase... ahí están los recuerdos. Un abrazo a todos, "volveremos a encontrarnos y hablaremos del pasado..."
Esta carta era lo mejor para cerrar partidas. Cómo zumbaba a la gente con mi monoblanco allá a finales de 1998.
That once grew in your hand
And the darts where your fingers did bleed
And the rush to your head?"
-- FLOGGING MOLLY, "You won't make a fool out of me" (Float)
Era de esperar. Con la vida de mierda que llevo, tarde o temprano tenía que acordarme de los buenos tiempos. Y en mi caso, los buenos tiempos, los mejores, pasaron hace más de 10 años, entre partidas de cartas y tiendas frikis. Muchas veces he tratado de igualar los resultados y de traer esos tiempos de vuelta pero sin mucho éxito.
Magic era el juego, el fútbol (por la tele y en la pista) era la vía de escape. ¿Cómo era mi vida en 1998? Seguramente no tan diferente, aunque lo que más se nota es lo que pesan los años y la ilusión perdida. Puede ser ingenuo intentar hacer lo mismo a los 28 que a los 16, pero a la mierda con ser responsables y encauzar la vida. Pero claro, ya no es lo mismo.
Mientras que otra gente mide su vida en términos de borracheras, líos de faldas, viajes y colocones, yo me dedicaba en esos años a estar con la gente, a aprender cosas y a divertirme sanamente. Siempre quise pillarme un buen pedo pero nunca lo hice (eso vendría más tarde). Era más sanote que los chicos del Hardcore. Una pena que, según su criterio, no me dedicara a luchar contra la opresión... pero como digo, eso me la soplaba.
Némesis, tienda friki emergente en aquellos años, era nuestra base. Primero fue el Castilla 23, donde nunca pude costearme sus sabrosas hamburguesas para cenar puesto que no tenía ni un puto euro (peseta) de paga (hasta el año 2000). Creo que con el cambio salimos ganando, aunque 1998 dejó momentos muy míticos... aquellos días de cambios en la Once (al lado de Estudio) eran lo puto mejor. Y las noches de partido por la tele ni te cuento.
No sé si es que en aquellos tiempos Santander estaba más viva o era yo el que lo estaba. La cosa es que siempre le echamos huevos, siempre nos lo pasamos bien, y éramos una pequeña familia. Ahora cada uno está por su lado, Némesis ha bajado muchísimo y a mí me toca echarle huevos otra vez y labrarme un porvenir. Pase lo que pase... ahí están los recuerdos. Un abrazo a todos, "volveremos a encontrarnos y hablaremos del pasado..."
Esta carta era lo mejor para cerrar partidas. Cómo zumbaba a la gente con mi monoblanco allá a finales de 1998.
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